«La Mirada de Judith»: El Theatro Municipal de São Paulo presenta una nueva lectura del clásico «El castillo de Barbazul»

La Mirada de Judith: Theatro Municipal de São Paulo presenta una nueva lectura del clásico «El castillo de Barbazul»

La doble función La Mirada de Judith reúne las óperas El Castillo de Barbazul, de Béla Bartók, y Yo, Volcánica, de Malin Bång. Las presentaciones se llevarán a cabo los días 26, 27, 28 y 30 de julio, ambas bajo la dirección escénica y concepción de Wouter Van Looy y dirección musical de Roberto Minczuk. Este proyecto es una colaboración artística entre el Theatro Municipal de São Paulo, la Folkoperan de Estocolmo y el Music Theater Transparant de Bélgica.

 

La doble función La Mirada de Judith presenta en el Theatro Municipal de São Paulo el clásico El Castillo de Barbazul, única ópera del compositor húngaro Béla Bartók, con libreto de Béla Balázs, y Yo, Volcánica, ópera especialmente encargada y estrenada en 2023, compuesta por Malin Bång con libreto de Mara Lee, ambas suecas, que reescribe la historia desde el punto de vista del personaje de Judith, reflexionando sobre relaciones tóxicas. La duración total es de aproximadamente 120 minutos, incluyendo un intervalo de 20 minutos.

 

Estas obras son una coproducción internacional con el Muziektheater Transparant (Bélgica) y la Folkoperan (Estocolmo), bajo la dirección escénica y concepción de Wouter Van Looy y la dirección musical del maestro Roberto Minczuk. Serán presentadas en cuatro fechas: el 26 de julio a las 20h, el 27 y 28 de julio a las 17h, y el 30 de julio a las 20h, en la Sala de Espectáculos.

 

El Castillo de Barbazul. Foto: Mats Backer

 

El Castillo de Barbazul presenta a Hernán Iturralde como Barbazul y Denise de Freitas como Judith. Basada en la famosa fábula que aparece por primera vez en los Cuentos de Mamá Oca de Charles Perrault en el siglo XVII, la ópera, escrita en 1911, presenta solo dos personajes: Barbazul, un noble misterioso, y Judith, su nueva esposa. La ópera comienza con la llegada de la pareja al castillo. Eventualmente, Judith solicita que se abran las puertas de la residencia, en una trama angustiante de suspense y violencia.

 

«En las últimas décadas, El Castillo de Barbazul ha estado en el programa de muchas casas de ópera, pero, siendo una ópera de 60 minutos, los directores buscan otra obra para combinar y llenar la noche. Esto a menudo lleva a concepciones dramatúrgicas a veces intrigantes, pero también forzadas, para unir piezas que no encajan juntas. Por esta razón, quise crear una ópera escrita específicamente para dialogar con la icónica obra maestra de Béla Bartók y Béla Balázs», explica Wouter Van Looy, director escénico.

 

El Castillo de Barbazul. Foto: Mats Backer

 

La segunda obra de la noche, Yo, Volcánica, tiene a Alexandra Büchel como Judith y Laiana Oliveira como Darkness 1. Centrándose en la protagonista femenina y sus conflictos, la ópera narra a una Judith que ya no quiere abrir las puertas del castillo de Barbazul. Viajando al subconsciente o a su propio castillo, Judith encuentra sus miedos y deseos, en una obra enfocada en la subjetividad de este personaje que vivió a la sombra y en la oscuridad de su esposo.

 

«Barbazul es una ópera sobre una relación fatal entre un hombre y una mujer, escrita por dos hombres a principios del siglo XX. Quería conocer la respuesta de dos artistas femeninas del siglo XXI a este drama de relaciones. Dos artistas maravillosas aceptaron el desafío, la compositora sueca Malin Bång y la autora sueca-coreana Mara Lee», explica el director.

 

Yo, Volcánica. Foto: Mats Backer

 

«Aunque contamos la historia desde el punto de vista de Judith, diría que ofrece una perspectiva humana sobre cómo podemos levantarnos y reconstruirnos después de ser destruidos en una relación tóxica. También es un llamado a aceptar la fluidez de la vida, como la describe el filósofo Zygmunt Bauman. Mara Lee utiliza la metáfora del horizonte. Donde Judith tenía un horizonte fijo (Barbazul), ella acepta al final de Yo, Volcánica la fluidez del horizonte. Un horizonte con curvas», concluye.

 

Desde el punto de vista musical, la composición de Béla Bartók para El Castillo de Barbazul está marcada por cambios constantes de tensión y atmósfera. Cada puerta que se abre sugiere un ambiente musical que desafía a la orquesta para capturar una coloración tan distinta y compleja.

 

En la música original de Malin Bång compuesta para Yo, Volcánica, el público podrá experimentar la historia de Judith contada desde otra perspectiva musical. La música de Malin Bång es una exploración de movimiento y energía. Define su material musical según la cantidad de fricción para crear un espectro de acciones imprevisibles y contrastantes, que van desde lo íntimo y apenas audible hasta lo áspero y obstinado.

 

La Mirada de Judith es posible gracias a un esfuerzo de creación e integración entre diferentes teatros de todo el mundo, como destaca la directora general del Complejo Theatro Municipal, Andrea Caruso Saturnino: el Muziektheater Transparant de Bélgica, la Folkoperan de Estocolmo y el Theatro Municipal de São Paulo. «Esta coproducción es prueba de cómo la relación entre teatros y artistas puede resultar en una obra nueva y fascinante en la historia de la ópera mundial», concluye.