Además de El caballero de la rosa, que se estrena este 5 de agosto y cuenta con la dirección escénica de Pablo Maritano, el programa también incluirá la ópera Actéon, la cual forma parte del proyecto Out of the Box con el objetivo de pensar los montajes de recitales «fuera de la caja». El elenco de la ópera de Strauss lo encabezan Carla Filipcic, Luisa Francesconi y Lina Mendes.

El mes de agosto será intenso para los amantes de la ópera. El Teatro Municipal de São Paulo presenta este mes dos de las óperas más reconocidas de la escena cultural: El caballero de la rosa, que se estrena el 5 de agosto, en la Sala de Exposiciones, con libreto de Hugo von Hofmannsthal, y Actéon, una «pequeña tragédie en musique»  de un pasaje de las Metamorfosis de Ovidio, que se presentará en la Sala del Conservatorio a partir del día 3.

«Presentar una ópera consagrada en un formato más conocido por el público y otro en un espacio menos habitual, permite una mirada diferente al conjunto de escenografía, performance, canto y música y renueva la visión de nuestro público sobre las posibilidades de puesta en escena», afirma Andrea Caruso Saturnino, director general del Complejo Theatro Municipal.

Una de las óperas más respetadas de todos los tiempos, El caballero de la rosa (Der Rosenkavalier) de Richard Strauss fue un gran éxito en la temporada del 2018 y llega de nuevo a la Sala de Conciertos trayendo, en formato de comedia, el resultado de la fructífera asociación entre Strauss y Hofmannsthal , además de una profunda reflexión sobre el género, el envejecimiento de las mujeres, la sororidad, las relaciones y, también, temas queridos por la sociedad vienesa a principios del siglo XX, como el surgimiento del psicoanálisis, la falta de similitud de la aristocracia y el ascenso final de la burguesía.

En la historia, dividida en tres actos y con libreto de Hugo von Hofmannsthal, la Mariscala (Carla Filipcic) abdica de su amor por el joven Octavio (Luisa Francesconi) para que conviva plenamente con la joven Sofía (Lina Mendes). La música, que para algunos críticos es conservadora en relación con las óperas coevas de Strauss, es un bálsamo para los corazones, un homenaje sonoro a la Viena de Mozart, escenario de los valses y presagio de tantas revoluciones musicales.

El espectáculo, que cuenta con la dirección escénica de Pablo Maritano, cuenta con la participación de la Orquesta Sinfónica Municipal, bajo la dirección de Roberto Minczuk y el Coro de São Paulo, bajo la dirección de Maíra Ferreira. La presentación durará aproximadamente cinco horas, con clasificación 16 años y entradas entre R $ 10 y R $ 150.

«Es una magnífica oportunidad para rearmar una obra con una participación deslumbrante de la orquesta y con tantos desafíos técnicos, esta vez con un elenco totalmente latinoamericano, entre ellos la argentina Carla Filipcic y el chileno Hernán Iturrald y», dice el director Roberto Minczuk, quien estuvo al frente de OSESP en el estreno brasileño de una obra de Strauss, en 2000.

«Esta pieza fue considerada una de las más importantes de su larga carrera y una de las más bellas de la historia de la música. El famoso trío del final del tercer acto fue la canción elegida para interpretar el funeral del compositor», añade Minczuk.

Pablo Maritano, director escénico de la ópera, destaca la actualidad de su planteamiento: «El  caballero de la rosa, en su obsesión proustiana por el tiempo, más atual que nunca, retrata un mundo de cambio y confusión que se condensa y desaparece ante nuestros ojos, enmarcado en una comedia de genio. Es el triunfo de la ambigüedad del realismo cotidiano. En palabras del propio Hoffmannsthal: ‘Es necesario buscar la profundidad. ¿Dónde? ¡En la superficie!'».

Ópera fuera de la caja

La ópera Actéon, de Marc-Antoine Charpentier, se presentará en la Sala del Conservatorio en la Plaza de las Artes y es parte del proyecto Opera Out of the Box, que saca los montajes de ópera de la caja escénica. Innovar y diversificar no solo el lugar, el escenario italiano y el disfrute convencional, sino también el diseño y la presentación de los espectáculos en su conjunto.

Con la dirección escénica de Leonardo Ventura y la participación del Coro Lírico, la ópera trata de la historia del noble cazador que se adentra, junto a sus amigos, en los dominios de la diosa Diana, y la pilla bañándose junto a sus ninfas. Como castigo por usurpación, la diosa lo convierte en un ciervo, y es devorado por sus propios perros, que no lo conocen.

Foto: Stig Lavor.

Actéon es un mito grecorromano presente en la recopilación Metamorfosis, del poeta Ovidio, y trabaja la puesta en escena sobre la clave de la transformación en todos los elementos de la obra (tiempo, espacio, cuerpos, vestuario, elenco, orquesta, luz e incluso espectadores) y sugiere discusiones actuales sobre cuestiones de género y medio ambiente al revisar a un varón que termina destruido por sus propias armas.

Gráficos barrocos e indígenas se funden en la escenografía de Chris Aizner, que construye sobre el escenario un espacio en el que orquestay coro griego ocupan lugares similares, especialmente cerca del público.  Con 60 minutos de duración, la clasificación es gratuita y las entradas cuestan R $ 30.

«Ser invitado por el Teatro Municipal para dirigir esta ópera barroca, del siglo 17, es muy gratificante para mí.  Charpentier es uno de los principales compositores de las piezas de Moliére, su libreto habla mucho del amor, pero también hablamucho de los límites entre lo que es barbarie y lo que es civismo y aún describe un hombre devastador nefasto», dice Leonardo Ventura, director escénico de la ópera Actéon.