Columna de opinión: Los concursos de canto lírico, su significado y proyección, por Andrés Rodríguez P.
Por Andrés Rodríguez P.
Recientemente se ha desarrollado con gran éxito la X versión del Concurso Internacional de Canto Lirico en Lima, Perú, organizado por Radio Filarmonía de dicho país. Por primera vez, el concurso tuvo una convocatoria latinoamericana, ya que anteriormente el concurso era abierto solo a cantantes peruanos. El concurso se desarrolló entre los días miércoles 19 y sábado 22 de octubre de 2022.
Se trata de una gran iniciativa de la prestigiosa Radio Filarmonía de Perú, destinada a buscar talentos jóvenes tanto en el Perú como ahora en toda Latinoamérica. La convocatoria llevó a 40 concursantes a presentarse al concurso, luego de haberse seleccionado de entre más de 70 postulaciones. Representantes de Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, México y Perú se dieron cita en este importante concurso que finalizó con la ronda final y la elección de los ganadores en un concierto realizado en el Gran Teatro Nacional de la capital peruana el sábado 22 de octubre. Representantes de México y Perú se llevaron los primeros premios.
Hay que destacar que en Latinoamérica son varios los concursos de canto lírico que se desarrollan en forma permanente. Algunos son anuales, otros bianuales o a veces se distancian un poco más. Pero lo importante es su continuidad y la realización de los mismos. Además del referido concurso peruano, hay que destacar el concurso Carlo Morelli en México, el María Callas en Brasil, el Luis Sigall de Chile o el dedicado únicamente a las voces femeninas patrocinado por el Capítulo chileno del National Museum for Women in the Arts, que recientemente tuvo su cuarta edición en Santiago.
Se trata de grandes oportunidades para que los jóvenes talentos líricos que van surgiendo de los conservatorios, academias y de las escuelas de música de cada país, tengan la posibilidad de mostrar sus talentos en público, ante jurados que conocen de voces, abriéndoles una oportunidad de exhibir sus condiciones vocales y musicales. A esos concursos asisten regularmente directores de teatros, agentes musicales y personas a las que le interesa detectar y promover a los jóvenes talentos. Los concursos están dotados de premios en dinero –que siempre son bienvenidos por los ganadores– y también de posibilidades de cantar en diferentes temporadas de ópera y de conciertos. Son los primeros pasos en una carrera artística, fundamentales para ir creciendo y desarrollándose en este difícil campo. Una buena presentación de un artista joven aunque sea en un rol secundario, lleva inevitablemente a que más tarde asuma un rol principal, que varios se fijen en él, muchas veces que se perfeccione en el extranjero y que comience la tan anhelada carrera internacional.
En resumen, los concursos son importantes vehículos para las carreras artísticas y su desarrollo y promoción debieran ser un objetivo de todos los países representados en OLA. En España, Europa y EE.UU., hay decenas de concursos cada año. Y de ahí sale la mayoría de los grandes cantantes que hoy animan las temporadas de ópera en todo el mundo.