Esta nueva producción de La ópera de los tres centavos contará con la dirección musical del estadounidense Ira Levin frente a la Orquesta del Teatro São Pedro, y dirección escénica de Alexandre Dal Farra. La ópera cómica y con fuerte crítica social tendrá siete funciones entre el 1 y el 11 de septiembre.

Este 1 de septiembre, el Theatro São Pedro estrenará La ópera de los tres centavos, del compositor Kurt Weill (1900-1950), con libreto del dramaturgo Bertolt Brecht (1898-1956), obra que se presentará por primera vez en Brasil, en el marco de su Temporada lírica 2022.

El espectáculo cuenta con la dirección escénica de Alexandre Dal Farra y la dirección musical de Ira Levin, un dúo que también dirigió el montaje de Los siete pecados capitales de Weill y Brecht, que el Theatro São Pedro presentó en noviembre de 2021. Stephanie Fretin firma la escenografía, Wagner Antonio la iluminación, Awa Guimarãe el vestuario y Tiça Camargo el maquillaje.

El elenco está formado por Rodrigo Esteves (Mac), Lina Mendes (Polly), Luisa Francescon, (Jenny), Homero Velho (Peachum), Juliana Taino (Ms. Peachum), Johnny França (Tiger Brown), Manuela Freua (Lucy) y Mauro Wrona (cantante callejero).

En 1927, Bertolt Brecht le propuso a Kurt Weill escribir la canción para el libreto de La ópera de los tres centavos. Brecht se basó en una traducción de Elisabeth Hauptmann de la Ópera del Mendigo, en la que John Gay había hecho un retrato satírico de la clase dominante inglesa. El dramaturgo cambió el eje de la obra original -una sátira a la aristocracia inglesa- a una crítica de la sociedad burguesa, tolerante con la existencia de un mundo marginado y corrupto.

Inspirados en los géneros de opereta y comedia musical, Brecht y Weill contaron en La ópera de los tres centavos la historia de Mac y su amor por Polly, la hija del enemigo Peachum. La acción comienza en el Soho, el barrio poco democrático de Inglaterra, en la mañana en que la pareja Peachum, «hombres de negocios» de un grupo de mendigos que sueñan con integrar a su hija, Polly, en la alta sociedad – descubren que su hija está a punto de casarse con Mac, el ladrón más reputado de Londres.

Para evitar la desgracia de la familia, Peachum intenta mover sus influencias con el intendente de la policía, Tiger Brown, quien a su vez es el padrino de la boda. La trama se desarrolla en una red de corrupción, sensualidad y celos hasta que, a través de Jenny, una prostituta que ha estado involucrada con Mac en el pasado, la justicia termina capturando al villano y condenándolo a muerte. El amor entre este y Polly parece igualmente condenado hasta que, en un desenlace inesperado, por la intervención de la reina Victoria, Mac se salva de la horca.

El director escénico Alexandre Dal Farra dice que concebir el espectáculo vino de dos puntos. «Una de ellas es entender que el motor de esta obra, algo que se sugiere en el original, es el resentimiento, y la delegación de venganza. Por otro lado, se trata de sacar a relucir un movimiento hasta cierto punto sumergido en el original, es decir, que la obra trate de un territorio de inminente estallido de una catástrofe. Tal catástrofe puede surgir desde cualquier punto, y está a punto de salir a la luz. Como cualquier gran artista, Brecht, en esta obra, opera como un sismógrafo, que siente en el suelo los terremotos que se avecinan», dice Dal Farra.

La ópera de los tres centavos se estrenó en Berlín el 31 de agosto de 1928, 200 años después del estreno de la obra en la que se basó: The Beggar’s Opera (1728) de John Gay.  El éxito fue rotundo, tanto en Alemania como en el extranjero. En un año, fue llevada al escenario 4 mil veces en 50 teatros.  Las canciones parten de la obra musical, ganando vida propia y del mundo.