El Teatro Cafam de Colombia se suma a la red de Ópera Latinoamérica
El Teatro Cafam es un importante espacio para la vida cultural en Bogotá, Colombia. Fue inaugurado en 2008, en el marco de la celebración del 50° aniversario de la Caja de Compensación Familiar Cafam, y en sus 15 años de existencia ha programado más de 2.500 funciones. Su propuesta artística incluye espectáculos de teatro, conciertos, zarzuela y, por supuesto, obras líricas y oratorios, siendo Carmina Burana, de Carl Orff, la presentación más reciente. En esta entrevista, Fernando Barrero, director de cultura, relaciones públicas y medios de Cafam, adelanta algunos de los próximos proyectos y coproducciones del teatro, explica las diferentes formas en las que se acercan a los públicos y reflexiona en torno al rol que la empresa privada puede jugar en la promoción del acceso a las culturas y las artes.
Fueron 65 voces del Coro de la Fundación Orquesta Sinfónica de Bogotá (FOSBO) las que subieron al escenario del Teatro Cafam, en la capital colombiana, en julio pasado para interpretar Carmina Burana, en la épica versión de cámara orquestada por Carl Orff. Frente al coro estuvo María José Villamil Rodríguez, directora artística y fundadora de FOSBO, y quien además ha mantenido una destacada carrera como docente en la música. De la mano de Villamil, la orquesta y el coro entregaron la majestuosidad de la obra de Orff a un público bogotano que acudió a uno de los tantos espectáculos que ofrece el escenario del Teatro Cafam.
El Teatro Cafam es un espacio dedicado a la cultura ubicado en la zona de Barrios Unidos, al norte de Bogotá. El teatro, inaugurado en 2008, fue concebido como un regalo para la ciudad de parte de la Caja de Compensación Familiar Cafam, en el marco de la celebración del 50° aniversario de la empresa y los 470 años de Bogotá. Cafam inició su historia en la década de 1950 como una pequeña farmacia que luego se convirtió en uno de los primeros supermercados del país. Hoy es una de las cadenas comerciales y de servicios más importantes de Colombia y administra hoteles, centros de convenciones, colegios y otros espacios.
“El principal inspirador de la construcción del teatro fue el actual director de la caja de compensación, el Dr. Luis Gonzalo Giraldo Marin”, explica Fernando Barrero, director de cultura, relaciones públicas y medios de Cafam. En una noticia publicada por el diario El Tiempo en 2008, Giraldo afirmó refiriéndose a la inauguración del teatro que: “La cultura hace parte de las necesidades en una sociedad moderna como muchas otras y creemos que es nuestra obligación interpretar esa necesidad. Y nada mejor que este regalo en los 50 años de Cafam”.
El espacio artístico cuenta con los más altos estándares tecnológicos y de capacidad, donde más de dos mil personas pueden asistir a un concierto al interior de la sala. Afuera, en la plazoleta con capacidad para 1.200 personas, los públicos se pueden congregar para ver los conciertos y espectáculos en pantallas gigantes.
Hoy, el Teatro Cafam cuenta con una programación que apunta a públicos de todas las edades y gustos artísticos. En sus 15 años de historia, ha acogido más de 2.500 funciones de disciplinas como el teatro, la ópera, zarzuela, danza y conciertos de música popular y tradicional. “Consideramos que es muy importante y enriquecedor para la cultura el que se generen espacios de circulación para las artes. Nuestro teatro está dispuesto a recibir varias de las producciones de los escenarios participantes de OLA y también, tener la oportunidad de compartir nuestras producciones con otros escenarios latinoamericanos”, adelanta en esta entrevista Fernando Barrero.
Una ventana hacia la escena lírica latinoamericana
¿Por qué el Teatro Cafam decidió unirse a Ópera Latinoamérica?
Es importante para nosotros ser parte de esta gran red de teatros latinoamericanos, lo cual nos permite mostrar y ofrecer nuestros productos líricos. De igual manera, estar al tanto de la programación a nivel latinoamericano particularmente y del mundo, en general. Lo consideramos un espacio privilegiado en donde confluye el arte.
El teatro se inauguró en 2008 con el apoyo de Cafam, una importante caja de compensación de Colombia. ¿Cómo se gestó la construcción de este espacio?
El Teatro Cafam se inauguró el 28 de febrero del 2008 y se gestó en el marco de la celebración de los 50 años de la Caja de Compensación Familiar Cafam y se le regaló a la ciudad de Bogotá este escenario cultural, que fue diseñado por el arquitecto Hernán Herrera, quien falleció en el año 2006 y lastimosamente no alcanzó a ver su obra terminada. El principal inspirador de la obra fue el actual director de la Caja, el Dr. Luis Gonzalo Giraldo Marin.
A tu juicio, ¿cuál es el rol que pueden o deben jugar las empresas privadas en la promoción y acceso de las personas a las culturas y las artes?
Las empresas son de vital importancia para la gestión de nuevas propuestas culturales en las diferentes artes. En nuestro caso, por ejemplo, somos un espacio cultural tanto para los nuevos artistas como para los tradicionales, en varios géneros, lo que nos permite tener un gran abanico de posibilidades. Además, tenemos el gran reto de atraer a nuestros afiliados hacia los diferentes espacios culturales con los que contamos, ya sean en nuestro escenario, la sala de exposiciones o con nuestra sección de promoción cultural.
Pero en este escenario no debemos olvidar el trascendental rol que está llamado a jugar el Estado, como principal animador en todos los órdenes: nacional, regional y local. En Colombia tenemos una ministra surgida de las tablas, Patricia Ariza, y creemos que la cultura con ella tendrá un gran dinamizador, después de haber sido la más afectada por la pandemia.
¿Qué papel juega el Teatro Cafam en la vida cultural de Bogotá? ¿Cómo se acercan a los públicos de la comunidad?
Cafam al ser una caja de compensación familiar tiene una gran responsabilidad con sus afiliados, sus familias y con la comunidad en general y es la de brindar servicios de la mejor calidad, por lo cual contamos con actividades culturales incluyentes, con espectáculos para todas las edades y gustos, presentando una programación variada de eventos que se distinguen por su creatividad y calidad.
Programamos para todos los públicos (niños, jóvenes, adultos, adultos mayores) y en estos primeros 15 años hemos presentado 2.500 funciones y recibido más de un millón 400 mil espectadores. Hemos tenido celebraciones especiales como los 45 años de la Ópera de Colombia y con la Fundación Orquesta Sinfónica de Bogotá nos preparamos para grandes obras.
Ya montamos y exhibimos con gran éxito Carmina Burana, estamos preparando El Mesías de Händel y para el 2023 tendremos otras grandes coproducciones.
¿Cómo se proyecta la programación de la lírica en el Teatro Cafam? ¿Cómo crees que el trabajo junto a OLA y otros teatros puede aportar en ese ámbito?
En nuestra programación contamos con un importante espacio para la lírica y muestra de ello es que para lo que resta del año tendremos El Mesías de Händel y por 15 años consecutivos tendremos en este 2022 el Gran Concierto de Fin de Año que se presenta el 31 de diciembre y está a la altura de los grandes conciertos europeos.
En el 2023 volveremos con la tradicional temporada de zarzuela junto con la Fundación Arte Lírico que se realiza anualmente en el mes de mayo y estamos revisando la participación en el Festival Internacional de Música Clásica organizado, por el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, y una temporada sinfónica de algunas de las obras más representativas de la música clásica, que se realizará durante todo el próximo año.
Uno de los ejes de trabajo que promueve Ópera Latinoamérica es el trabajo en red a través de la coproducción, venta o alquileres de producciones entre los teatros que forman parte de la organización. ¿Cuál es tu expectativa de trabajo con el Teatro Cafam y OLA en este ámbito?
Consideramos que es muy importante y enriquecedor para la cultura el que se generen espacios de circulación para las artes. Nuestro teatro está dispuesto a recibir varias de las producciones de los escenarios participantes de OLA y también, tener la oportunidad de compartir nuestras producciones con otros escenarios latinoamericanos. En este sentido, tenemos una gran expectativa y estamos seguros del éxito de los intercambios. Con Chile, por ejemplo, estábamos a punto de iniciar la traída de artistas de esa gran nación, pero la pandemia se nos atravesó.