Destellos de la memoria juvenil: el Teatro Real ofrecerá 15 funciones de «La bohème»
La bohème, que estará en escena entre el 12 de diciembre y el 4 de enero, llegará al Teatro Real en una coproducción con la Royal Opera House de Londres y la Lyric Opera de Chicago, que ya se pudo ver en su escenario en 2017.
El prestigioso director teatral británico Richard Jones sitúa al espectador en un lugar privilegiado, contemplando una representación de la ópera simultáneamente desde bambalinas y sentado en su butaca en la sala.
La dirección musical correrá a cargo de Nicola Luisotti, principal director invitado del Teatro Real, que dirigirá su décimo título al frente del Coro y de la Orquesta Titulares del Teatro Real y la tercera ópera de Puccini, después del éxito de Turandot (2018) y Tosca (2021).
Luis Miguel Méndez dirigirá las funciones de los días 30 de diciembre y 3 de enero.
Dos repartos darán vida a esta popular ópera coral, en la que destacan, en los papeles principales, las sopranos Ermonela Jaho y Eleonora Buratto (Mimì), los tenores Michael Fabiano y Andeka Gorrotxategi (Rodolfo) y las sopranos Ruth Iniesta y Raquel Lojendio (Musetta).
En torno a La bohème se han organizado diversas actividades en el Teatro Real, destacando, el 19 de diciembre, dos funciones de ¡Todos a la Gayarre!, a las 12.00 y a las 17.00 horas.
Entre el 12 de diciembre y el 4 de enero el Teatro Real ofrecerá 15 funciones de La bohème, de Giacomo Puccini, en una coproducción del Teatro Real con la Royal Opera House de Londres y la Lyric Opera de Chicago, que se presentó en su escenario en 2017.
La génesis de La bohème, y también el desarrollo de todo su proceso creativo hasta el estreno de la ópera en el Teatro Regio de Turín el 1 de febrero de 1896, están minuciosamente documentados gracias a la abundante correspondencia entre Giacomo Puccini, su editor y mentor Giulio Ricordi, y los libretistas Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, que iniciaron su tormentosa y fructífera colaboración en esta ópera, escribiendo posteriormente los libretos de Tosca y Madama Butterfly.
Partiendo del libro Escenas de la vida bohemia, de Henri Murger (1822-1861), nacido como una serie de relatos autobiográficos publicados en forma de folletín, los dos libretistas, siempre celosamente dirigidos por Puccini, construyeron un libreto coral, en el que cuatro jóvenes bohemios -un escritor (Rodolfo), un pintor (Marcello), un músico (Schaunard) y un filósofo (Colline)- sortean las dificultades económicas y las inclemencias del tiempo con humor e ilusión, buscando su lugar en un París efervescente, bullicioso e invernal.
La historia de amor trágica entre uno de ellos, Rodolfo, aspirante a poeta, y la sastrecilla Mimì, cuya muerte por tuberculosis, inexorable, les sorprende, articula una especie de camino iniciático que despide los desenfrenos y sueños de la juventud y revela la vida real, con toda su contundencia y trascendencia.
Con su genial paleta orquestal, su dominio de la prosodia y su enorme talento dramático, Puccini va construyendo la personalidad de los jóvenes con su característica habilidad para articular los destellos más anecdóticos y divertidos de lo cotidiano con los sentimientos más hondos, pasionales y arrebatadores. Así, entrelaza sus frases cortas “de conversación” con otras de enorme aliento melódico y dramático. Su orquestación sugiere, con enorme eficacia tímbrica, desde detalles tan nimios como el serpenteo de las llamas o el tintineo de las monedas, hasta las ‘ambientaciones’ casi cinematográficas de la desangelada buhardilla, del bullicio del París navideño o de la soledad y privaciones de la pobreza.
La evocación de momentos pasados, como si fueran destellos que la memoria revive y actualiza, está magistralmente recreada con la utilización de motivos musicales asociados a emociones, sentimientos, o incluso a objetos a los que Puccini concede un enorme poder simbólico, como la vela de Mimì, la cofia rosa que le compra Rodolfo, el gabán de Colline, o el manguito que calienta las manos frías de la protagonista en su lecho de muerte.
Son estos momentos que vienen y vuelven con la memoria, que están escondidos y asoman con las vivencias que suman y construyen el camino la vida, los que vertebran la producción de La bohème que se podrá ver en el Teatro Real.
En su propuesta dramatúrgica, el prestigioso director británico Richard Jones y el escenógrafo y figurinista Stewart Laing presentan la ópera como una sucesión de Escenas de la vida bohemia presentadas al espectador sin ocultarle los trabajos de backstage que normalmente desarrollan los técnicos detrás del escenario. Así, el público ve cómo se cambian los decorados, cómo se utilizan diferentes artilugios para lograr efectos teatrales y cómo se amontonan elementos escenográficos en las bambalinas, como si fueran retazos de vida apiñados en la memoria.
Situándose en un lugar privilegiado, el espectador contempla permanentemente el pasado y el presente de los personajes, incapaz de sumergirse en el París frío y efervescente de los jóvenes bohemios porque lo verá siempre representado sobre el escenario.
Pero este artificio del ‘teatro dentro del teatro’, en que se confunden el tiempo real y el teatral, el espacio del público y del artista, el drama de la ópera y sus metáforas, llevará al espectador a una interpretación más rica de la obra de Puccini, potenciada por su visión desde distintos ángulos, pero también con sus reflejos.
Dos repartos darán vida a esta popular ópera coral, en la que destacan, en los papeles principales, las sopranos Ermonela Jaho y Eleonora Buratto (Mimì) y los tenores Michael Fabiano y Andeka Gorrotxategi (Rodolfo), secundados por las sopranos Ruth Iniesta y Raquel Lojendio (Musetta); los barítonos Joan Martín-Royo y Manel Esteve (Schaunard), los tenores Vicenç Esteve y Pablo García López (Benoît); los barítonos Lucas Meachem y Andrzej Filonczyk (Marcello); y los bajos Krzysztof Baczyk y Solomon Howard (Colline) y Roberto Accurso (Alcindoro).
La dirección musical correrá a cargo de Nicola Luisotti, con excepción de los días 30 de diciembre y 3 de enero, en los que la ópera será dirigida por Luis Miguel Méndez.
La bohème será el décimo título que Nicola Luisotti dirigirá en el Teatro Real, después de Il trovatore (2007), La damnation de Faust (2009), Rigoletto (2015), Aida y Turandot (2018), Don Carlo (2019), La traviata y Un ballo in maschera (2020) y Tosca (2021).
Además del Coro Titular del Teatro Real, dirigido por Andrés Máspero, participa en la producción el coro infantil Pequeños Cantores de la JORCAM, preparados por Ana González.
La Bohème vuelve al Teatro Real en fechas navideñas, trayendo a su escenario la alegría, complicidad y sueños de cuatro jóvenes que se encuentran con la vida real, paradójicamente, encontrándose con la muerte.